...Definitivamente, en tiempos de auges nacionalistas y pulsiones identitarias hay que leer más a Amin Maalouf...
El autor: http://es.wikipedia.org/wiki/Amin_Maalouf
Reseña: https://atalayar.com/content/esperanza-levantina-para-despu%C3%A9s-del-naufragio
Algunas citas del libro:
“«¡Ahora, todo lo que
no está prohibido es obligatorio!». Nunca he olvidado esa frase, que considero
una excelente definición del autoritarismo.”
“Atrapados entre dos
fuerzas indomeñables, la de la rabia árabe que iba creciendo, y la de la
arrogancia occidental, que golpeaba a derecha e izquierda con la sutileza de un
paquidermo borracho, los míos estaban perdidos hicieran lo que hicieran. No les
reprochaban sus opiniones, ni sus palabras, ni sus actos, les reprochaban sus
orígenes, que no habían escogido y que no podían cambiar.”
“«Por cada pez pequeño,
hay otro más pequeño aún», me dijo un día un historiador desengañado. De hecho,
en cuanto se considera que la separación es una solución adecuada, no hay ya razón
alguna para no seguir «partiendo en
rodajas»…”
“Nunca dejaré de oponerme a la idea de que las poblaciones que tienen lenguas o religiones diferentes harían mejor en vivir separadas entre sí. Nunca me decidiré a admitir que la etnia, la religión o la raza sean cimientos legítimos para edificar naciones.”
“¿No sería deseable, efectivamente, ver aflorar, frente a todas las atrocidades identitarias, un anchuroso movimiento capaz de llevar a cabo una movilización masiva de nuestros contemporáneos en torno a valores universales y más allá de todas las fronteras políticas, religiosas, étnicas o culturales?”
“La homogeneidad es una
quimera costosa y cruel. Se paga un precio muy caro para llegar a ella; y en el
supuesto de que alguna vez se alcance, resultará aún más cara.”
“Nunca dejaré de oponerme a la idea de que las poblaciones que tienen lenguas o religiones diferentes harían mejor en vivir separadas entre sí. Nunca me decidiré a admitir que la etnia, la religión o la raza sean cimientos legítimos para edificar naciones.”
“¿No sería deseable, efectivamente, ver aflorar, frente a todas las atrocidades identitarias, un anchuroso movimiento capaz de llevar a cabo una movilización masiva de nuestros contemporáneos en torno a valores universales y más allá de todas las fronteras políticas, religiosas, étnicas o culturales?”
“La conducta de algunas
fuerzas tradicionalmente situadas a la izquierda no es menos preocupante;
tiempo atrás enarbolaban la bandera del humanismo y del universalismo, pero en
la actualidad prefieren preconizar luchas de carácter identitario, convirtiéndose
en portavoces de diversas minorías étnicas, de comunidades o de categorías;
como si al renunciar a construir un proyecto para la sociedad entera albergasen
la esperanza de volver a ser mayoritarias al coaligar los resentimientos.”
“La humanidad tiene que
elegir entre la libertad y la felicidad, y para la inmensa mayoría la felicidad
es mejor, ponía cínicamente Orwell en labios de uno de sus personajes de 1984. Nadie nos va a presentar las cosas
de forma tan cruda; pero, en el contexto de este siglo, un dilema así no parece
ya del todo una insensatez.”
“Cuando, para calmar
los temores de nuestros contemporáneos, escogemos negar la realidad de los
peligros y minusvalorar la ferocidad del mundo, nos arriesgamos a que los
hechos nos desmientan a no mucho tardar.”
“Si las carreteras del
porvenir están cuajadas de trampas, la peor forma de comportarnos sería seguir
andando con los ojos cerrados y mascullando que todo saldrá bien.”