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jueves, 13 de febrero de 2014

Héctor Abad Faciolince - El olvido que seremos

El autor: http://es.wikipedia.org/wiki/H%C3%A9ctor_Abad_Faciolince



Reseña: http://www.mascultura.com.mx/recomendacion_elolvidoqueseremos

Algunas citas del libro: 

“Mi mamá decía siempre ‘niñas’ porque las niñas eran más y entonces esa regla gramatical (un hombre entre mil mujeres convierte todo al género masculino) para ella no contaba”

“Mi abuela nunca fue feliz con él, pues no se le parecía a su adorado hermano ni en la cama ni en la mesa, los dos sitios más importantes de una casa,…”

“Porque si el alma equivale a la mente, o a la inteligencia, es fácil de demostrar (basta un accidente cerebral, o los abismos oscuros del mal de Alzheimer) que el alma, como dijo un filósofo, no sólo no es inmortal, sino que es mucho más mortal que el cuerpo”

“Los humanos, en el dolor más hondo, podemos sentirnos confortados si en la pena nos conceden una rebaja menor”

“Aunque uno no se quiera suicidar, o no sea capaz de levantar la mano contra sí mismo, la opción de hacerse matar por otro, y por una causa justa, se vuelve más atractiva si se ha perdido la alegría de vivir. Creo que hay episodios de nuestra vida privada que son determinantes para las decisiones que tomamos en nuestra vida pública”

“Vivir simplemente para gozar es una legítima ambición animal. Pero para el ser humano, para el Homo Sapiens, es contentarse con muy poco. Para distinguirnos de los demás animales, para justificar nuestro paso por la tierra, hay que ambicionar metas superiores al solo goce de la vida. La fijación de metas distingue a unos hombres de otros”.

“Él mismo reconocía ese defecto suyo y muchas veces dijo: ‘Soy muy buen padre, pero muy mala madre’, lo cual quería decir que era bueno para fecundar, para poner la semilla de una buena idea, pero malo para la paciencia de la gestación y de la crianza”

“Abrir el cajón de un muerto es como hundirnos en esa cara que sólo era visible para él y que sólo él quería ver, la cara que protegía de los otros: la de su intimidad”

“No hemos soñado el uno con el otro para pedir venganza, sino para abrazarnos”

“Los asesinos no han podido exterminarnos y no lo lograrán porque aquí hay un vínculo de fuerza y de alegría, y de amor a la tierra y a la vida que los asesinos no pudieron vencer. Además, de mi papá aprendí algo que los asesinos no saben hacer: a poner en palabras la verdad, para que ésta dure más que su mentira.”

“A veces, por la calle, llora. O no llora, simplemente piensa en algún detalle del país lejano y los ojos se le ponen rojos de visiones remotas, las conjuntivas se excitan de no ver, y hay agua que chorrea por sus mejillas, pero no llora, digamos que llueve sobre su cara y él deja que la lluvia lo moje, como si tal cosa.”

“Cada día estoy más canoso, aunque no como ellos. Pero eso sí, cada cana que me crezca espero merecérmela.”

Sobrevivimos por unos frágiles años, todavía, después de muertos, en la memoria de otros, pero también esa memoria personal, con cada instante que pasa, está siempre más cerca de desaparecer.”

2 comentarios:

  1. Humor, ternura, sensatez, inteligencia...desde que leí este libro soy un fan de Héctor Abad Faciolince

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    Respuestas
    1. Estoy de acuerdo... El próximo que compartiré es su "Tratado de culinaria para mujeres tristes".

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