Oviedo
Malos tiempos
A la
ley de la selva regresamos,
al imperio del sálvese quien pueda,
a la venta de todo en almoneda,
a ir perdiendo lo que antes conquistamos.
Competimos, ya nunca cooperamos,
y tras la competencia… ¿qué nos queda…?
Sólo un gobierno que nos deshereda
mientras los buenos tiempos añoramos.
La solidaridad no está de moda,
aunque es verdad que a todos incomoda
ver colas en la oficina del paro.
Pero el poder no tiene miramientos,
dicta medidas sin remordimientos
y espera que pasemos por el aro.
al imperio del sálvese quien pueda,
a la venta de todo en almoneda,
a ir perdiendo lo que antes conquistamos.
Competimos, ya nunca cooperamos,
y tras la competencia… ¿qué nos queda…?
Sólo un gobierno que nos deshereda
mientras los buenos tiempos añoramos.
La solidaridad no está de moda,
aunque es verdad que a todos incomoda
ver colas en la oficina del paro.
Pero el poder no tiene miramientos,
dicta medidas sin remordimientos
y espera que pasemos por el aro.
© Javier Suárez Pandiello
Don Dinero, por Paco Ibáñez según Quevedo
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